El CAMI de Chongón, como otros que he venido visitando, es un espacio de desarrollo, donde conocí mujeres y niñ@s que desarrollan sus destrezas, reciben talleres, adquieren nuevos conocimientos, en general que le dan una oportunidad a sus vida de cambiar y a sus familias una oportunidad de prosperar.
En el CAMI de Chongón hay más de 80 mujeres capacitándose en talleres de costura, manualidades, globoformas, artes plásticas, entre otras actividades que las hacen personas felices porque explotan sus propias capacidades y además productivas porque les permiten emprender, si desean, un negocio propio.
Emprender como lo hizo Margarita, una verdadera guerrera del cambio que lleva 15 años recibiendo cursos y talleres en el CAMI, quien gracias a su arte lleva el sustento a su familia. Su próximo reto es crear su propia marca y empezar a vender por catálogo sus productos.
Como Margarita miles de mujeres están reescribiendo su historia, están superándose y demostrando que es mejor enseñar a pescar que regalar los peces, que el trabajo dignifica y las políticas asistencialistas de corte populista nos menosprecian como seres humanos.Seamos cada día como Margarita, que sea su ejemplo de vida el que mueva nuestra conciencia. Margarita y su historia de vida nos dice que la verdadera revolución del progreso y bienestar se hace así, con trabajo y esfuerzo!
Seguímos!
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